Por Enrique J Ortiz
El PP ha ganado las elecciones en Extremadura pero las ha perdido. Quiero decir que a pesar de haber sacado el mayor número de votos y de diputados regionales (las ha ganado) no ha conseguido el objetivo que se había propuesto (las ha perdido)
Estas elecciones eran una apuesta clarísima del PP en la que iba a ser la primera parte de su ascenso al poder de la nación. La política de Feijóo o de la parte del PP que apoya a Feijóo (es un partido tremendamente dividido) consiste en primer lugar en conseguir la mayoría absoluta. Para ello debe anular o hacer muy pequeño a VOX, y así arrastrar a toda la derecha, o a la mayor parte. Es evidente que ese objetivo no se ha conseguido. A falta de tener los resultados definitivos en donde se podrá estudiar si la abstención de la izquierda y la aplicación de la ley D’Hondt ha favorecido a VOX, como puede sospecharse ya que es las zonas agrícolas donde este ha crecido más
El número de votos que ha aumentado el partido de Abascal es de 18.002 más que el PP.
| Partido | Votos 2023 | Votos 2025 | Diferencia de Votos |
| PP | 237.384 | 268.420 | +31.036 |
| PSOE | 243.083 | 164.915 | -78.168 |
| VOX | 49.342 | 98.380 | +49.038 |
| Unidas por Ext. | 36.373 | 64.135 | +27.762 |
La suma del aumento de votos de los dos partidos es de 80.074 aproximadamente igual que el número de votos que ha perdido el PSOE, puesto que la abstención ha sido 10 puntos mayor, hay que deducir que el votante de derechas se ha movilizado (en los dos partidos) y el de izquierda es el que se ha abstenido.
| Dato | Elecciones 2023 | Elecciones 2025 | Diferencia |
| Participación | 70,35% | 60,1% | -10,25% |
| Abstención | 29,65% | 39,9% | +10,25% |
En segundo lugar la estrategia del PP trata de encadenar una serie de resultados autonómicos favorables en las próximas elecciones (Aragón, Andalucía y Castilla y León) que le permita ocupar un buen puesto en la parrilla de salida de las generales. Podemos decir que este objetivo solo lo ha conseguido a medias, y es que al no poder gobernar sin asumir parte de los postulados de VOX, le va a ser muy difícil arrastrar, como pretende, ese voto de centro centrado que es donde la teoría clásica de la Transición dice que se ganan las elecciones.
Pero lo que en el PP no ven, no pueden ver, es que mientras se votaba en Extremadura los agricultores de toda Europa se manifestaban en contra de la política agraria. Y justo Extremadura es una región donde la agricultura es fundamental. Si la repugnante prensa que tenemos (en su mayoría) buscara la verdad como debe esa noticia habría estado en portada desde hace tiempo ya que el sector agrícola es uno de los más importante de nuestra economía pues es la base de la industria alimentaria que es la tercera en importancia de España. Probablemente entonces el resultado de VOX hubiera sido superior.
Pero Abascal (sic) no crece más porque no acaba de entender que en nuestro país las regiones forman parte del alma de la gente y que el nefasto estado de las autonomías ha creado una serie de agravios comparativos que pesan como el plomo a la hora de votar. La campaña de Guardiola ha estado llena de banderas extremeñas, copiando la campaña de Moreno en Andalucía donde se apropió de todo voto andalucista, campaña que le costó a Macarena Olona, uno de sus mejores activos, perder las elecciones. Y no lo entiende o no lo quiere entender porque rechaza un partido que le pueda cuestionar. Esta vez le ha salido bien, pero parece muy difícil que pueda seguir así.







